cual artista inspirado, inventando su cielo.
Que la musica guie mis pasos hasta el fin,
y que el viento recoja mi ultimo resuello
convirtiendolo en una ligera nota de primavera
Aquí, sobre el tiempo suspendido,
que se enrolla perezosamente
en el calor de mi taza de te,
contemplo los segundos
cual si fueran minutos;
Tomando el tiempo de ver,
de sentir,
de entender...
y de no esperar nada,
de vivir tan solo este momento,
postergando su inevitable disolución
al ritmo de mi respiración
larga y profunda.
Simple es el canto de la flauta
y refinadas las perlas de viento que desgrana...
Con su corazón inocente
y sus alitas livianas
baila invisiblemente,
entre las notas, una hada.
Simple es el canto de la flauta
y refinadas las perlas de viento que desgrana...
Resuena suave , cual templo efímero,
donde la conciencia se rectifica,
en los brazos del infinito.
Beber el aire desde el hueco de tu mano.
Barruntarte la nuca y la extrañeza.
Reconocer el mundo de nuevo
desde la mirada incrédula
de tus gafas de concha.
Merodearte la cintura y dotarla de alas
aun cuando nada parezca tener sentido.
Rastrear el deseo
en tu pecho desarmado.
Buscar contigo,
ansiosa, como tú,
el camino intermitente de la duda
para volver a la tierra,
eterna patria de vacío.